En el Nombre de Dios, El Misericordioso, El Compasivo

Assalam Aleykum Wa Rahmatullah Wa Barakatuh

Bienvenidos todos, Mi nombre es Bilal y he construido este sitio web para aquellas personas que quieran conocer un poco mas acerca del Islam, no contiene cosas muy avanzadas ni rebuscadas, la idea es que puedan al menos familiarizarse con esta hermosa religion, con los conceptos basicos, nuestras creencias, nuestros pilares de fe y por sobre todas las cosas las enseñanzas que nos dejo el ultimo de los profetas enviado por Dios.

Le pido a Dios que este sitio sea de utilidad para ustedes y que Reciban la bendicion de nuestro amado Señor.

SALAM

domingo, 28 de marzo de 2010

La Mujer entre el Coran y La Biblia Pt. 2


El Legado de Eva

La imagen bíblica de la Eva tentadora ha tenido un impacto extremadamente negativo sobre las mujeres en la tradición judeocristiana. Todas las mujeres creían haber heredado de su madre, la bíblica Eva, su culpa y su mentira. Consecuentemente, todas eran infieles, moralmente inferiores y malvadas. La menstruación, la concepción y el embarazo fueron considerados como justo castigo por el ancestral delito cometido por el maldito sexo femenino. Para poder apreciar en toda su dimensión la negativa influencia de la Eva bíblica sobre todas sus descendientes femeninas hemos de acudir a los textos de algunos de los más importantes pensadores judíos y cristianos de todas las épocas.


Comencemos por el Antiguo Testamento y miremos en los textos de la llamada Literatura Sapiencial, en donde encontramos:

"Encontré más amarga que la muerte a la mujer enredadora, cuyo corazón es una trampa y cuyas manos son cadenas. El hombre que agrada a Dios debe escapar de ella, pero el pecador en ella habrá de enredarse...mientras yo, tranquilo, buscaba sin encontrar, encontré a un hombre justo entre mil, más no encontré una sola mujer justa entre todas". (Ecclesiastes 7:26-28).

En otro lugar de la Literatura Hebrea, que se encuentra en la Biblia Católica podemos leer:

"No hay maldad comparable a la maldad de la mujer...
El pecado llegó con una mujer y a ella se debe el hecho de que todos nosotros habremos de morir."
(Ecclesiasticus 25:19,24).

Hasta el día de hoy, los judíos ortodoxos, en sus oraciones diarias matinales recitan:

"Bendito seas Dios, Rey del Universo, porque Tú no me has hecho mujer".

Otra plegaria aparece en muchos libros de oraciones judíos:

"Alabado sea Dios que no me ha creado gentil. Alabado sea Dios que no me ha creado mujer. Alabado sea Dios que no me ha hecho ignorante."

Segun la religion cristiana Eva había pecado, induciendo después a Adán a seguir su conducta. Por consiguiente, Dios los expulsó a ambos del Cielo a la Tierra, que habría sido maldita por su causa. Ellos legaron su pecado, que no había sido perdonado por Dios, a todos sus descendientes y, por eso, todos los humanos nacen en pecado. Para purificar a los seres humanos de su ‘pecado original’, Dios tenía que sacrificar en la cruz a Jesús, que es considerado ‘el Hijo de Dios’.


Por consiguiente, segun la religion cristiana Eva es responsable de su propio error, del pecado de su marido, del pecado original de toda la humanidad, y de la muerte del ‘Hijo de Dios’.

En otras palabras, segun la religion cristiana una mujer actuando por su cuenta causó la caída de la humanidad. ¿Qué ocurrió con sus hijas? Ellas son tan pecadoras como ella y tienen que ser tratadas como tales. Escuchemos el tono severo de San Pablo en el Nuevo Testamento:

"La mujer debe aprender a estar en calma y en plena sumisión. Yo no permito a una mujer enseñar o tener autoridad sobre un hombre; debe estar en silencio. Adán fue creado primero, luego Eva. Y Adán no fue el engañado; fue la mujer quien fue engañada y se volvió pecadora". (I Timoteo 2:11-14).

San Tertuliano es aún más grosero que San Pablo cuando, hablando a sus ‘hermanas más queridas’ en la fe, dijo:

"¿No sabéis que cada una de vosotras es una Eva? La sentencia de Dios sobre vuestro sexo sigue vigente: la culpa debe existir también necesariamente. Vosotras sois la puerta del Diablo: sois las transgresoras del árbol prohibido: sois las primeras transgresoras de la ley divina: vosotras sois las que persuadísteis al hombre de que el diablo no era lo bastante valiente para atacarle. Vosotras destruísteis fácilmente la imagen que de Dios tenía el hombre. Incluso, por causa de vuestra deserción, habría de morir el Hijo de Dios."

San Agustín, fiel al legado de sus predecesores, escribió a un amigo:

"Lo que la diferencia, ya sea esposa o madre, es que es aún Eva la tentadora, de la que nosotros debemos protegernos en cualquier mujer...... Yo no veo la utilidad que puede tener la mujer para el hombre, con excepción de la función de parir a los hijos."

Siglos después, Santo Tomás de Aquino todavía consideraba a las mujeres como seres defectuosos:

"Respecto a la naturaleza individual, la mujer es incompleta y mal dispuesta; la fuerza activa contenida en la semilla masculina tiende a la producción de una semejanza perfecta en el sexo masculino; mientras la producción de la mujer proviene de un defecto en la fuerza activa o de alguna indisposición material, o incluso de una cierta influencia externa."

Finalmente, el famoso reformador Martin Lutero no podía ver beneficio alguno en la mujer salvo en el hecho de traer al mundo tantos niños como le sea posible, sin tener en cuenta cualquier otro aspecto:

"Si se cansan o incluso se mueren, eso no tiene importancia. Dejémoslas morir en el parto, que es para lo que ellas están allí".


Una y otra vez las mujeres son denigradas a causa de la imagen de la Eva tentadora, gracias al relato del Génesis.Para resumir, la concepción judeocristiana de la mujer ha sido contaminada por la creencia en la naturaleza pecadora de Eva y de su descendencia femenina.


Si prestamos ahora atención a lo que el Corán nos dice sobre las mujeres, comprenderemos pronto que la concepción islámica de la mujer es bastante diferente de la Judeocristiana. Dejemos que el Corán hable por sí mismo:

« Para los musulmanes y las musulmanas, para los creyentes y las creyentes, para los devotos y las devotas, para los hombres veraces y las mujeres veraces, para los pacientes y las pacientes, para los que se humillan y las que se humillan, para los que practican la caridad, para los hombres y mujeres que ayunan, para los hombres y mujeres que guardan su castidad, y para los hombres y mujeres que se comprometen mucho en la alabanza a Allah, para todos ellos Allah tiene preparado el perdón y una gran recompensa. » (Corán 33:35).


"Los creyentes, hombres y mujeres, son protectores unos de otros: ellos mandan lo que es justo y prohiben lo que es malo, hacen la oraciones regularmente, practican la caridad y obedecen a Allah y a Su Mensajero. A ellos les mandará Allah Su Misericordia: Allah es el Poderoso, el Sabio." (Corán 9:71).


"Y su Señor escuchó su plegaria: ‘No permitiré que se pierda obra de ninguno de vosotros, ya sea varón o hembra, pues habéis salido los unos de los otros’." (Corán 3:195).


"Quien obre mal no será retribuido sino con una pena similar. En cambio, los creyentes, varones o hembras, que obren bien, entrarán en el jardín y serán proveídos en él sin medida." (Corán 40:40).


"Al creyente, varón o hembra, que obre bien, le haremos, ciertamente, que viva una vida buena y le retribuimos, sí, con arreglo a sus mejores obras." (Corán 16:97).

Está claro que la visión coránica de la mujer no es diferente de la del hombre. Ambos son criaturas de Dios cuya meta sublime en la tierra es rendir culto a su Señor, realizar actos virtuosos y evitar el mal, y ambos serán juzgados de acuerdo a ello. El Corán nunca menciona que la mujer sea la puerta del diablo o que sea mentirosa por naturaleza.

El Corán tampoco menciona que el hombre haya sido hecho a imagen de Dios; todos los hombres y mujeres son sus criaturas. Eso es todo. Según el Corán, el papel de la mujer en la tierra no se reduce a parir. Se le exige que haga tantas buenas acciones como al hombre. El Corán nunca dice que no haya exisitido jamás una mujer de recta conducta. Por el contrario, el Corán ha instado a todos los creyentes, mujeres y hombres, a seguir el ejemplo de mujeres ideales como la Virgen María y la esposa de Faraón:

"Y Allah pone como un ejemplo para aquellos que creen, a la esposa de Faraón; ella dijo: ‘Oh mi Señor: construye para mí, en Tu proximidad, una mansión en el Jardín, y sálvame de Faraón y de sus obras, y salvame de aquellos que hacen el mal’. Y María, la hija de Imran, que conservó su virginidad y en la que infundimos de Nuestro Espíritu. Y ella testificó la verdad de las palabras de su Señor y de Sus revelaciones y era uno de las devotas" (Corán 66:12).

miércoles, 24 de marzo de 2010

La Mujer entre el Coran y La Biblia Pt. 1


LA MUJER ENTRE LA BIBLIA Y EL CORAN

¿Por culpa de Eva?


Las tres religiones ( Judia , Cristiana y el Islam ) están de acuerdo en un hecho: Tanto los hombres como las mujeres han sido creados por Dios, el Creador de todo el Universo. Sin embargo, la discrepancia comienza poco después de la creación del primer hombre,Adan , y de la primera mujer, Eva.

La concepción judeocristiana de la creación de Adan y Eva está narrada con detalle en el Libro del Génesis (2:4 y 3:24). Dios les prohibe a ambos que coman los frutos del Árbol Vedado. La serpiente induce a Eva a comerlos, y Eva, seguidamente, induce a Adam a comer con ella.


Cuando Dios inquiere a Adan por lo que ha hecho, éste echa toda la culpa a Eva:

"La mujer que pusiste a mi lado me ha dado la fruta del árbol y yo la he comido."

Por consiguiente, Dios dice a Eva:

"Yo aumentaré tus sufrimientos durante el embarazo; parirás tus hijos con dolor. Tu deseo será el de tu marido y él tendrá autoridad sobre ti."

Él le dijo a Adam:

"Puesto que obedeciste a tu mujer y comiste del Árbol... maldeciré a la tierra por tu causa; conseguirás el pan con gran esfuerzo todos los días de tu vida."

La concepción islámica de la primera creación se encuentra en numerosos lugares del Corán. Por ejemplo:

« ‘¡Oh Adán! ¡Habita con tu esposa en el Jardín y comed de lo que queráis, pero no os acerquéis a este árbol! Si no, seréis de los impíos’. Pero Shaytán les insinuó el mal, mostrándoles su escondida desnudez, y dijo: ‘Vuestro Señor no os ha prohibido acercaros a ese árbol sino por temor de que os convirtiérais en ángeles u os hiciérais inmortales’. Y les juró: ‘¡De verdad que os aconsejo bien!’. Les hizo, pues, caer dolorosamente. Y cuando hubieron gustado ambos del árbol, se les reveló su desnudez y comenzaron a cubrirse con hojas del Jardín. Su Señor les llamó: ‘¿No os había prohibido ese árbol y dicho que Shaytán era para vosotros un enemigo declarado?’. Dijeron: ‘¡Señor! Hemos sido injustos con nosotros mismos. Si no nos perdonas y Te apiadas de nosotros, seremos, ciertamente, de los que pierden’. » (Corán, 7-19,23)

Sin embargo, Allah le tuvo misericordia a Adan y a Eva y le dio de escoger, y toda la humanidad heredo esta opción de ellos:

« Luego Adam, recibió palabras inspiradas por su Señor, que se volvió a él; es verdad que El es el que se vuelve a favor de Sus siervos, el Compasivo. Dijimos: Descended todos de aquí; y si os llega de Mí una guía, los que la sigan no tendrán nada que temer ni se entristecerán. » (Coran 2 :37-38)

Una mirada cuidadosa sobre los dos relatos de la historia de la Creación, revela algunas diferencias fundamentales :

El Corán, contrariamente a la Biblia, atribuye la misma responsabilidad a ambos, Adán y Eva, por el error cometido.En ningún lugar del Corán podemos encontrar la más leve insinuación de que Eva tentó a Adán para que éste comiera del árbol o que ella hubiese comido antes que él. En el Corán, Eva no es tentadora, seductora o engañadora.


Además, Eva no es castigada con sufrimientos durante el embarazo. Dios, de acuerdo con el Corán, no castiga a uno por las faltas de otro. Ambos, Adán y Eva, cometieron un pecado y entonces pidieron perdón a Dios y Él los perdonó a los dos.

viernes, 19 de marzo de 2010

Algunos Narradores de Hadices.


Abu Hurairah

Se llamaba Abdur Rahman y su apodo era Abu Huraira, que significa el padre del gato. Se le llama así por su amor hacia este animal. Se convirtió al Islam durante la batalla de Jaiber y vivió unido a su maestro espiritual incluso después de su fallecimiento. Fue nombrado gobernador de Bahrain por el Kalifa Umar.

El Profeta conocía su entusiasmo por memorizar sus relatos. Cuando Abu Huraira le preguntaba determinadas preguntas, le contestaba: “Estaba seguro, Abu Huraira, que nadie aparte de ti me formularia esta pregunta” (Bujari)

Nunca estaba dispuesto a abandonar el sagrado recinto de la mezquita por temor a perder un solo relato de su maestro. Tenía una memoria excelente y fue un gran depositario de las tradiciones. Murió en el año 69 después de la Hillra, a la edad de 78 años.

Aisha (Ra)

Aisha (la madre de los creyentes) era hija de Abu Bakr y esposa del Profeta, la paz y bendiciones de Dios sean con él. Nació nueve o diez años después de la emigración a Medina y tenía 18 años cuando el Profeta falleció. Es digna de elogio por su genio. Era muy versada en la historia de los árabes y su poesía. Era una gran oradora y muchos de sus discursos fueron registrados por Ahmad bin Abi Tahir en su libro “Balagat Al Nisa” (discursos de mujeres). Aisha (Ra) instruyó a hombres, mujeres y niños en la mezquita del Profeta que reunía alrededor de doscientos alumnos entre los que se encontraban hombres tan eminentes como Urwa bin Zuwair, Qasim bin Muhammad, Abu Salma bin Abdul Rahman bin Auf y Masruq. Era muy generosa y caritativa y llego a poner en libertad a sesenta y siete esclavos. En la batalla de Uhud, cuando los musulmanes se encontraban en un estado calamitoso, ella misma acarreaba agua a sus espaldas y daba de beber a los heridos. Murió en el año 58 después de la Hillra un miércoles, el 17 de Ramadán, y fue enterrada en el célebre cementerio de Jannat-ul-baqi.

Abdullah Bin Masud

Abdullah bin Masud fue cronológicamente el sexto converso al Islam, y el primero en recitar el Corán abiertamente en las plazas públicas de Meca. Emigró primero a Etiopía y después a Medina y acompañó al Profeta en todas sus batallas. Abdullah se parecía al Profeta en su modo de hablar. Fue nombrado juez de Kufa por Umar, el segundo Jalifa. Murió en Medina en el año 32 d. H. a la edad de 69 años. Ibn Masud es muy popular como tradicionista y es una autoridad en el Corán.

Abu Shuraih al Khuzai

Abu Shuraih se llamaba Jalid bin Umar. Aceptó el Islam antes de la conquista de Meca y ejerció una gran influencia en Hejaz.

Abu Qatada Bin Arit.

Abu Qatada fue uno de los constantes compañeros del Profeta (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él). Murió en Medina en el año d. H. a la edad de 70 años.

Abu Masud

Abu Masud fue uno de los peregrinos de Medina que se hallaban presentes en el Segundo Pacto de Usaba. Se estableció en Kufa y murió allí durante el califato de Ali.

Abu Zarr

Abu Zarr se llamaba Jundab de nombre y Qaimul Quran de apellido. Fue uno de los Muhallirin o emigrantes y un conocido compañero del Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él). Predicó el Islam entre la gente de su tribu y vivió en Damasco durante largo tiempo, pero después se estableció en Zabdah, cerca de Medina. Murió allí durante el Jalifato de Umar.

Abdullah bin Abbas

Abdullah era primo del Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) y fue un gran orador e intelectual. Fue privilegiado dos veces con la visión del ángel Gabriel y era uno de los principales compañeros del Profeta (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él). Umar (ra) solía consultar con él todos los asuntos importantes y fue la mano derecha de Ali (ra) durante su califato. Ostentó el cargo de gobernador de Kufa durante cierto tiempo y murió en Taif en el año 68 d. H. a la edad de 71 años. Hanzilah Bin Rabi

Hanzilah pertenecía a la tribu de Tamim. Fue uno de los escribas que escribió las revelaciones coránicas. Murió durante el reinado de Muawiyah (ra).

Muaz Bin Jabal

Musa Bin Jabal formaba parte de las setenta personas que fueron introducidas al Islam durante el segundo pacto de Uqabah. Era un hombre muy instruido y fue nombrado preceptor de Yemen por el Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él). También fue designado gobernador de Siria durante el Jalifato de Umar. Murió de peste junto con su hijo a la edad de 68 años.

Thauban

Thauban fue uno de los esclavos que fue comprado y puesto en libertad por el Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él). Murió en Hems en el año 54 d. H.

Wasilah Bin Asqa

Wasilah aceptó el Islam durante el período de la batalla de Tabruk y tuvo la oportunidad de servir al Profeta (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) durante tres años. Se estableció en Balat, a nueve millas de Damasco. Murió en Jerusalén a la edad de 100 años.

Jabir Bin Abdullah

Jabir bin Abdullah bin Amr es un compañero muy conocido del Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él). Murió en el año 78 d. H. en Medina a la edad de 94 años y fue el último compañero que falleció en ese lugar.

Ali Bin Abi Talib

Ali (Ra) fue el primer joven que aceptó el Islam. Se convirtió en el cuarto sucesor del Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él). Era su primo y yerno al mismo tiempo. Murió el 17 de Ramadán del año 40 d. H., asesinado por un Jarayita. Participó en todas las batallas y fue uno de los soldados más valientes del Islam. Era piadoso y bondadoso con los indigentes. Fue Ali quien aconsejó a Umar la adopción de la Hillrah o emigración del Profeta como punto de partida del calendario musulmán.

Abu Musa Al’Ashari

Abu Musa destaca en la historia del Islam por ser uno de los árbitros entre Ali y Muawiyah en su disputa por el califato. Defendió la causa del Islam y se distinguió como comandante en ese campo. Se le asignó el puesto principal del gobierno de Kufa y Basrah. Falleció en Kufa en el año 42 d. H.

Abdullah Bin Amr

Abdullah bin Amr bin Al-As transmitió setecientas tradiciones. Poseía un buen conocimiento de las Escrituras judías y cristianas. Murió en el año 75 d. H. en Egipto.

Abdullah Bin Umar Bin Al-Jattab

Abdullah bin Umar nació un año antes de la llamada y él, junto con su padre, abrazaron el Islam en la Meca. Era sumamente devoto, instruido y piadoso. Al condenar el Islam la esclavitud, puso en libertad a mil esclavos. En la batalla de Badr no se le permitió unirse a las filas de combatientes por su extremada juventud.

Abu Ayyub Al’Ansari

Jalid bin Zaid es popular por su apellido Abu Ayyub Al’Ansari. Cuando el Profeta emigró a Medina, escogió su casa como residencia, aceptando su hospitalidad. Formó parte de casi todas las expediciones, especialmente la que dirigió Muawiyah (ra) contra Constantinopla. Durante el curso de una batalla cayó gravemente enfermo. Pidió a sus compañeros que trasladaran su cuerpo, una vez muerto, al campo de batalla para ser pisoteado por los pies de los combatientes. Murió en el año 51 d. H. en Constantinopla y de acuerdo con su deseo fue enterrado a los pies de la Muralla de la ciudad. Su tumba fue descubierta cuando Constantinopla fue conquistada por Mohammad II, el Sultán de Turquía, y cerca de su tumba se construyó una bella mezquita, que se llama mezquita de Abu Ayyub Al’Ansari. El Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) estableció un lazo de fraternidad entre él y Musab bin Umair.

Nafi Bin Hariz

Nafi bin Hariz abrazó el Islam en el año 8 d. H. Era un esclavo y, como otros muchos, fue comprado y puesto en libertad por el Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él). Se estableció en Basora, donde murió en el año 49 d. H.

Anas Bin Malik

Anas contaba diez años de edad en el momento de la Hillra o emigración a Medina. Sirvió al Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) durante diez años durante los cuales, según él, nunca recibió el más leve reproche. Durante el califato de Umar, abandonó Medina y se estableció en Basora para enseñar las tradiciones al público. Fue el último de los compañeros del Profeta en fallecer. Falleció en el año 91 d. H.

martes, 16 de marzo de 2010

El Islam y la Fe


Hadith

1- Umar, Ibn al Jatab, dijo: “Oí al Mensajero de Al-lah, (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él), decir: Los actos serán juzgados por las intenciones, y el hombre obtendrá lo que haya pretendido. Así pues, para quien emigre por la causa de Al-lah y su Mensajero, su emigración será aceptable para Al-lah y su Mensajero y quien emigre por bienes materiales que aspira o por una mujer para contraer matrimonio, su emigración será juzgada por lo que haya pretendido”.

2- Ibn Umar dijo: El Mensajero de Al-lah, (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: “El Islam está construido con cinco pilares: (1) Dar testimonio de que no hay dios sino Al-lah y Muhammad es el Mensajero de Al-lah, (2) observar la oración, (3) pagar el Zakat, (4) hacer la peregrinación y (5) ayunar en Ramadán”. (Bujari)

3- Umar Ibn al Jattab, dijo: “El Mensajero de Al-lah, (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él), dijo: “La fe consiste en que creáis en Al-lah y Sus Libros y Sus Profetas y en el Ultimo día y que creáis en Su Qadar (leyes divinas) sobre el bien y el mal”. (Muslim)

4- Anas dijo: “El Mensajero de Al-lah, (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: “Ninguno de vosotros posee una fe auténtica hasta que no me ame a mí más que a su padre, hijo y toda la humanidad”. (Bujari).

5- Abu Huraira dijo: “El Mensajero de Al-lah, (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él), dijo: El Iman (la fe) tiene setenta partes. La más excelente de ellas es decir: “No existe dios sino Al-lah”, y la más pequeña consiste en retirar obstáculos del camino; y la modestia forma parte de la fe”.

6- Abu Humamah dijo: Cierta persona vino al Mensajero de Al-lah y le preguntó qué era la fe. Él contestó: “Cuando tus buenas acciones te complazcan y tus malas acciones te produzcan desagrado, entonces eres creyente.” Él contestó; “¡Oh Mensajero de Al-lah! Entonces ¿qué es el pecado?” Contestó: “Cuando algo remuerde tu conciencia, abandónalo”. (Ahmad)

7- Abu Huraira dijo: “Un beduino acudió al Profeta Muhammad , (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él), y dijo: “Dime una buena acción que, si realizo, me llevará ciertamente al paraíso” Contestó: “Adorarás a Al-lah y no le atribuirás copartícipes; observa las oraciones obligatorias, paga el Zakat obligatorio y guarda el ayuno de Ramadán”. Él dijo: “Por Él en cuyas manos está mi vida, no me he apartado de ello ni un ápice”. Cuando marchó, el Profeta, (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: “quien quiera ver a uno de los moradores del paraíso, que mire a este hombre”.

8- Abu Huraira dijo: “El Mensajero de Al-lah, (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él), dijo: “Ciertamente Al-lah no mira vuestra apariencia externa ni vuestras riquezas, sino que observa vuestros corazones y vuestras acciones”. (Muslim)

9- Fudalah, dijo de Ubaid, dijo: “El Mensajero de Al-lah, (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él), dijo: “Bendito sea quien es guiado hacia al Islam, a quien le basta con su sustento y se siente satisfecho con ello”. (Tirmidi)

10- Imran, hijo de Husain, dijo: “El Mensajero de Al-lah, (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él), dijo: “Un grupo de mi comunidad continuará esforzándose por la causa de la verdad y triunfará sobre sus opositores”. (Abu Daud)

11- Abu Huraira dijo: “El Mensajero de Al-lah, (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él), dijo: “Ciertamente el Todopoderoso y Glorioso Al-lah hará surgir al final de cada siglo a alguien que revivirá la religión (Islam) para ellos”. (Abu Daud)

12- Alí, hijo de Husain, dijo: “El Mensajero de Al-lah, (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él), dijo: “El mejor Islam de un hombre es abstenerse de lo que no le concierne”. (Tirmidi)

domingo, 14 de marzo de 2010

La Aquidah


LA AQUIDAH

La
palabra 'aquidah (creencia o doctrina) o su raíz 'aqd gira entorno
al concepto de adhesión certeza, afirmación y sin ninguna duda.

La 'aquidah no es un acto sino que representa aquellos conceptos que
el musulmán debe reconocer y creer en su corazón, porque Allah los ha
revelado en Su Libro a través de su Profeta.

Los Principios básicos de
la 'aquidah se encuentran en este versículo
del Generoso Qur'an:

"El Mensajero y sus seguidores creen en lo que le fue revelado por su
Señor. Todos creen en Allah, en Sus Ángeles, en Sus Libros y en Sus
Mensajeros. No hacemos diferencia entre ninguno de Sus Mensajeros. Y
dicen: Oímos y obedecemos. Perdónanos
Señor nuestro, pues ciertamente
a Ti volveremos."
(2:285)

El Profeta definió esta creencia en el conocido hadiz de Yibril ,
donde dijo:
"El Imaan (la fe) es creer en Allah, sus ángeles, Sus
Libros, Sus Mensajeros, y resurrección."

La 'aquidah en el Islam alude a los conocimientos auténticos
transmitidos por Allah y Su Mensajero , que el musulmán debe creer en
su corazón.

La 'aquidah ha de ser una creencia absoluta y sin la menor duda, ya
que el Qur'an dice:

"Por cierto que los verdaderos creyentes son quienes creen en Allah y
en Su Mensajero, y no dudan..."
(49 :15)

"¡Señor nuestro! Tú eres Quien reunirá a los hombres el Día sobre el
cual no hay duda. Allah no falta jamás a Su promesa."
(3:9)

La verdadera doctrina,
la 'aqidah se encuentra en el Qur'an y en la
Sunnah
, es pura y clara, convincente al intelecto del ser humano,
capaz de llenar el corazón de Fe, certeza, luz y vida.

La Relación entre 'Aquida, Iman y Shari'ah

La creencia que reside en el corazón, pero no tiene manifestación
visible es una creencia vacía, nula y fría, que no merece ser llamada
'aquidah. Podemos encontrar numerosas personas que conocen la verdad
pero no viven acorde a ella. Otros se resisten a la verdad que
conocen, de la misma manera que Iblís ( el demonio), que a pesar de
que tuvo acceso a las grandes verdades universales, conoció a Allah y
supo de los Mensajeros y los Libros, se condenó oponiéndose a ella.

El Faraón se encontraba seguro de que los milagros de Moisés provenían
de Allah , sin embargo los negó por orgullo y arrogancia.

Esto no significa que no debemos prestar atención a las prioridades en
el conocimiento y las obras. Pero para tener una 'aquidah correcta no
se deben abandonar ciertos asuntos por considerarlos menos
importantes.

Por lo que
la 'aquida esta estrechamente relaciona, con los pilares de
la Fe y creer en ellos y con la aplicación del Islam en la vida diaria
mediante
la Shari'ah.


Fuente
: ( Qur'an, Hadiz Sahih, " La Creencia en Allah" Al Ashqar)